Por nuestros difuntos

Rosario en sufragio de las almas del Purgatorio

Se reza el Padrenuestro, Avemaría y Gloria y después las siguientes invocaciones, añadiendo a cada invocación: dales, Señor, el descanso eterno y luzca para ellos la luz eterna. Descansen en paz, amén.

  • Jesús mío, por el abundante sudor de sangre que derramaste en el Huerto, ten misericordia de las almas de mis parientes que penan en el Purgatorio.
  • Jesús mío, por la cruel flagela­ción que sufriste atado a la columna, ten misericordia de las almas de mis y amigos que penan en el Pur­gatorio.
  • Jesús mío, por la corona de agu­dísimas espinas que traspasaron vuestra santísima cabeza, ten misericordia del alma que esté abandonada y privada de sufragios, y de la que esté más lejos de ser liberada de las penas del Purgatorio.
  • Jesús mío, por los dolorosos pasos que diste con la cruz a cuestas, ten misericordia del alma que esté más cerca de salir del Purgatorio; y por las penas que pasaste junto a tu Santísima Madre al encontraros en la vía del Calvario libra las almas que fueron devotas de tu querida Madre, de las penas del Pur­gatorio.
  • Jesús mío, por vuestro santísimo cuer­po crucificado, por vuestros santís­imos pies y manos clavados con duros clavos, por vuestra muerte cruel y por vuestro santísimo costado abierto por la lan­za, ten piedad y misericordia de las pobres almas, líbralas de las penas que sufren, y llévalas contigo al Paraíso.

Después de una breve pausa de silencio se añade la siguiente ORACIÓN REPARADORA:

Señor, Padre todopoderoso, sabiendo que yo también estaré un día junto a los hombres que han dejado ya este mundo, ahora quiero rezarte también por mi alma, y consciente de mi miseria, levanto humildemente ante Ti esta pobre súplica.

Eterno Padre, por las manos de María Dolorosa, te ofrezco el Sagrado Corazón de Jesús con todo su amor, con todos sus sufrimientos y con todos sus méritos: 

  • para expiar todos los pecados que he com­etido hoy y durante mi vida pasada. Gloria al Padre
  • para purificar el bien que no he sabido hacer con perfección hoy y durante toda mi vida pasada. Gloria al Padre
  • para suplir bien que he dejado de hacer hoy y durante toda mi vida pasada. Gloria al Padre

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